Jag
La verdad es que hay muchas cosas fascinantes que contar sobre Suecia. Es una especie de "Un Mundo Feliz" en versión vikinga o algo así. Cierto lo que dices, pero Suecia es diferente. En Suecia se enseña mucho a la gente a depender únicamente de sí mismos y, en caso extremo, del estado. No de la familia. No de los amigos. Son extremadamente individualistas, aunque vayan contando la patraña de que aquí se piensa en el colectivo y tal.
Lo que hacen aquí, sin embargo, y todavía no he logrado dilucidar cómo, es meterles un miedo atroz a meter la pata. Observo con ternura y mucha preocupación a mi hijo, que da sus primeros pasos en el adoctrinamiento escolar. En la guardería aquello era maravillosamente hippie, hacían lo que les salía de las narices, música, colores, fiesta, teatro. Mi barrio quizás es especial, porque aquí viven muchos artistas, muchos bohemios, muchos ricos culturetas, profesionales liberales... Y quizás eso se reflejaba en la guardería, que era un caos maravilloso donde los niños se ayudaban entre ellos y los mayores cuidaban a los pequeños como si fueran hermanos.
En el colegio, el primer año, tuvo una profesora que era inhumana, una loca que por poco le mete en la clase de educación especial. Ahora tiene una jovencita encantadora que les enseña a pensar en el mundo y las cosas que suceden. Y la verdad es que no veo yo que les metan miedo en el cuerpo.
Pero de mayores... ay.... los suecos viven aterrorizados con su rendimiento. Hacen suficiente? Hacen mal? O con sus interacciones sociales. Ayyyy! Dije algo hiriente a aquella persona que me crucé en la calle? Y si he hecho mal al escribir ese SMS?
Es algo demencial, como una autorrepresión insoportable que hace que la gente, directamente, se rompa. Creo que el tema va más por la religión protestante (es dios que es como un padre: "Haz lo que digo... y luego si eso me pienso si te acepto en el cielo"). Da igual lo que hagas, puede ser insuficiente.
Esa mentalidad les hace ser extraordinariamente efectivos, trabajadores, emprendedores y de todo. Pero son unos infelices y unos deficientes sociales. Son incapaces de tejer amistades relajadas. Llevan muy mal eso de sentarse en una terraza y perder el tiempo, meditando mientras te tomas una cerveza. Para ellos todo tiene un inicio y un final.
- Tomar cervezas: De 14:00 a 15:15
- Metro: De 15:17 a 15:49
- Lavar la ropa: De 16:00 a 19:00
- Cena (macarrones con albóndigas de ikea y ketchup): 19:05
Entonces no creo que el challenge de mi amigo sea el cambio o poder formar un pensamiento que cuestione el status quo. El challenge es cómo hacer que los suecos sean medianamente felices como para poder interactuar entre ellos de una forma productiva.
De hecho una de las inversiones que hizo el Björkman ese es K9, un co-living en Östermalm, el barrio más pijo de Estocolmo, donde gente joven convive en espacios muy reducidos, con poca intimidad, pero comparten todo. Conocí a un chico emprendedor que tenía su piso y se sentía como la mierda en la soledad sueca. Esa soledad que está imbuida en todos los Suecos (como método de control?). Y el tipo vendió su piso y se fue a vivir ahí y dice que es lo mejor que le ha pasado en su vida. Que por primera vez no se siente solo. El pavo pagaba 800€ por una especie de altillo dentro de una habitación que compartía con otros.