Es que ese barrio de Hornstull, que era de borrachos y maleantes, ahora es lo más. Es precioso, viví unos años y quizás fueron de los mejores años de mi vida. Por las mañanas me bajaba a correr y a nadar en una islita que hay al lado, con su playita, sus patitos, sus castores... una pasada. Pues al grano, ese barrio era todo de trabajadores de los barcos y el muelle y los pisos eran muy pequeños, de una habitación.
Y por lo que veo el plano es un poco como el piso que tenía yo, que tenía 57 metros y era un salón muy majo de techos altos y dos ventanas preciosas, una cocina así de encimeras pequeñas pero amplia y con una zona para la mesa de comer, y luego una especie de vestíbulo estancia que usábamos para dormir. Por supuesto la planificación era horrorosa, porque esa estancia era sin ventana y casi dando al pequeño hall de entrada. Pero cuando eres joven y estás enamorado ese piso era una auténtica maravilla.
Pero comprarte eso y perder un Panamera... vamos no me jodas.